30/01/2018 - David Monserrat - Puerto del Rosario
Están preocupados porque el Consistorio les ha dado un plazo que se acaba en días para que desalojen la zona de descanso de Corralejo. Son una decena de caravanistas y autocaravanistas que viven allí y que, según denuncian, no tienen más opciones para instalarse.
Julio César García, este lunes, en la zona de descanso de Corralejo, donde están caravanas y autocaravanas. / Javier Melián (Acfi Press)
Una decena de caravanas y autocaravanas de la habilitada como zona de descanso de Corralejo, próxima a la piscina municipal, no tienen un lugar adonde ir. Los propietarios de los vehículos residen allí de forma permanente y conviven con los turistas que hacen uso de la zona por periodos cortos con fines vacacionales. A los instalados de forma permanente, unas 20 personas a día de hoy, el Ayuntamiento de La Oliva les ha dado un plazo que se cumple «antes de una semana» para abandonar el camping.
«Quieren echarnos, dicen que damos mala imagen, pero la mala imagen la están creando ellos porque no han hecho nada en esta zona para dejarla en condiciones. Somos personas que trabajamos en la zona de Corralejo y que no podemos hacer frente a los altos precios de los alquileres que hay aquí», explica Julio César García, músico de 52 años que trabaja ofreciendo shows en establecimientos turísticos del norte de la isla y que asegura que fueron el propio alcalde y la concejala de Urbanismo quienes hace unos 20 días les instaron a marcharse.
Además, si la Policía Local les ve aparcados en otra zona del pueblo, también les echan: «No nos dejan estar en ningún lugar, no sabemos dónde meternos; y no todos aquí tienen una autocaravana, algunos solo tienen caravana y no pueden moverse».
El camping se habilitó en su día como zona de descanso y, según García, llegó a haber «una subvención pública de casi 400.000 euros para acondicionar el espacio con servicios» que, sin embargo, nunca se materializarían. Los servicios municipales solo se encargan hoy de gestionar las aguas negras generadas. Los usuarios de la zona de descanso no pagan por tener sus vehículos aparcados, aunque aseguran que no les importaría hacerlo y que, en realidad, es lo que quieren, «de forma legal y a cambio de los servicios básicos de cualquier zona de descanso».
El Consistorio confirma que hay un expediente abierto al respecto y que, según un reglamento municipal de 2015, en esta zona de descanso «solo se permiten las autocaravanas, no las caravanas» ni otras instalaciones que ocupen más superficie que la del citado vehículo. La utilización del espacio se permite por «un máximo de 24 horas y no se cobra por ello». Con respecto a las aguas negras, «el servicio de recogida vale 15 euros y se presta a cualquiera que vaya con una caravana a vaciar el depósito». Por tanto, según el Consistorio, los usuarios permanentes están «incumpliendo la normativa».
Entre los usuarios de la zona de descanso de Corralejo se apunta a la posibilidad de que el interés del Consistorio por echarles responda «a intereses especulativos» y, de hecho, «se está hablando de una ciudad deportiva o de un hotel», según caravanistas. Desde el Ayuntamiento de La Oliva niegan tal afirmación y dicen que, en el marco de los planes de modernización turística del Gobierno de Canarias, para dicha zona «se ha proyectado la creación de un gran parque».
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