PURI R. CALVO FERROL
El aparcamiento de autocaravanas en las inmediaciones de las playas es un problema contra el que lucha el Concello desde hace años. Costó en su día alguna bandera azul y continúa siendo una práctica habitual, a pesar de que en el año 2009 el gobierno de Vicente Irisarri inauguró un área de estacionamiento reservada exclusivamente a este tipo de vehículos en las inmediaciones del recinto de FIMO que permanece desierta a diario.
El jefe de la Policía Local, José Manuel Pérez Díaz, informó de que el pasado martes dio comienzo una campaña de vigilancia y control del aparcamiento de autocaravanas en las playas, que continuará en días sucesivos para constatar que los vehículos no permanecen en estas zonas más de dos días, que son los autorizados legalmente más un tercero si se solicita un permiso municipal que, en realidad, nadie tramita. La primera inspección detectó la presencia de ocho autocaravanas en Ponzos –siete de ellas con matrícula alemana– y otras cuatro en Doniños-Outeiro, aunque en realidad se trata de comprobar que no permanecen por la noche en las playas. La Policía orienta a los propietarios de los vehículos para que se dirijan al camping de As Cabazas (de pago), aunque el área de autocaravanas (gratuita) está complemetamente desierta.
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