La Constitución Española en su artículo 87 dice:
Artículo 87
1. La iniciativa legislativa corresponde al Gobierno, al Congreso y al Senado, de acuerdo con la Constitución y los Reglamentos de las Cámaras.
2. Las Asambleas de las Comunidades Autónomas podrán solicitar del Gobierno la adopción de un proyecto de ley o remitir a la Mesa del Congreso una proposición de ley, delegando ante dicha Cámara un máximo de tres miembros de la Asamblea encargados de su defensa.
3. Una ley orgánica regulará las formas de ejercicio y requisitos de la iniciativa popular para la presentación de proposiciones de ley. En todo caso se exigirán no menos de 500.000 firmas acreditadas. No procederá dicha iniciativa en materias propias de ley orgánica, tributarias o de carácter internacional, ni en lo relativo a la prerrogativa de gracia.
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La Ley Orgánica, mencionada en el apartado 3 anterior existe desde marzo de 1984, aunque fue ligeramente modificada dando otra redacción a su preámbulo, por otra ley, la 4/2006 de 26 de mayo.
Con una somera lectura que hagamos de la Ley y del articulado expuesto, es evidente que el ciudadano español de pleno derecho, tiene cauces suficientes para proponer iniciativas y conseguir, en cierta medida, modificar algunos aspectos de la vida diaria de los Españoles.
Cierto es que en muchas ocasiones, el legislador (Parlamento) ha mostrado incluso desprecio por infinidad de iniciativas populares (ej.: caso Sandra Palo) en las que se intenta que algún tipo de ley sea modificada. El legislador, huyendo del sentir popular y de la alarma social que en cada caso se haya producido, argumenta la desconexión aduciendo que son materias en las que sólo puede decidir el Parlamento. En efecto, tiene que decidir el Parlamento pero no por ello tienen que despreciar una iniciativa, un clamor popular que en muchos casos llega al Registro del Parlamento incluso con más firmas de las quinientas mil que exige el artículo 87.3. Aún así, por causas que desconocemos –seguramente pactos y trapicheos entre partidos políticos- nunca llegan a cuajar. Algunos dirigentes, tímidamente hacen un guiño de cara a la galería diciendo a los representantes populares que intentarán proponer su iniciativa para que se convierta en Ley que harán lo posible para hacer suya esa iniciativa pero lo cierto y verdad es que iniciativas como la nombrada o tastas otras en materia penal, fiscal o laboral, nunca se han plasmado negro sobre blanco en el Boletín Oficial del Estado.
Pero… quién es el Parlamento sino los representantes legítimos de los ciudadanos ? ¿ Cómo se puede llegar a tal grado de cinismo y prepotencia como para menospreciar asuntos que han generado una especial alarma social ?
Peor se ha puesto la situación en el caso de la concentración en la Puerta del Sol de Madrid en la que la gran mayoría de las reivindicaciones de los que se han dado en llamar “Iniciativa 15-M” o “democracia real, ya!” tratan se asuntos que sobre todo vienen a retirar privilegios de la casta política, trata de penalizar corruptelas políticas y en definitiva, dar un vuelco a la situación actual tan estancada como penosa y que en muchísimos casos será imposible salir de esta crisis si no empezamos a meter la tijera por todo aquello que siendo un gasto superfluo está gravando más la situación, si cabe.
Afortunadamente para ellos, para los políticos, nunca tendrán una responsabilidad personal sobre una mala gestión realizada. Ellos siempre salen indemnes sólo con decir que siempre han tratado de hacer lo que más le beneficiaba a su país, incluso a sabiendas de que informes, encuestas, estadísticas y parámetros de economía real no avalaban esas actuaciones. En contra, el ciudadano normal, cuando por cualquier causa se equivoca, paga su equivocación con creces.
Quizá con este mismo motivo bastaría para levantar el campamento en la puerta del Sol. En estos momentos no está la situación para producir muchos cambios. El caos dentro del Gobierno es superlativo, hasta el punto de intentar introducir en la vida pública sus propios fracasos tanto de Gobierno, como de Partido que lo sustenta y esto no es bueno para todos. No es bueno para nadie.
Nuestros acreedores, esos que quieren cobrar cuanto antes los 700 mil millones de deuda pública que tenemos colocada en el extranjero, quieren que este gobierno se mantenga, que sea capaz de terminar –si alguna vez las empezó- las reformas estructurales y económicas que son necesarias para empezar a despegar.
Al margen de todo lo dicho, aunque ya hemos argumentado que la concentración de Sol debe desmantelarse cuanto antes para que hagan uso del artículo 87.3 CE, pues para salvaguardar el derecho de reunión se está conculcando el derecho de libre comercio de todos los comerciantes de la plaza y alrededores, por lo que para no conseguir “nada” por parte de los “NI-NI” concentrados, se está produciendo un mal mayor cual es el de evitar que los comerciantes ejerzan su derecho a trabajar y a generar riqueza. No hay proporcionalidad entre los bienes protegidos por parte de ambos gobiernos, nacional y municipal. Entendemos que el desmantelamiento antes de las recientes elecciones iba a resultar algo violento y sobre todo impopular para los responsables directos de que el asentamiento se mantuviese, Ministerio del Interior y Ayuntamiento. Nadie quería perder votos por obligarles a desaparecer de la plaza con una más que probable violencia, cubierta por todas las grandes cadenas de TV nacionales y extranjeras. No querían otro episodio como el de Tiannanmen, a menor escala, claro.
Lo que es evidente es que los cauces para que el pueblo se acerque al Parlamento están establecidos por Ley y mantener esta situación a costa de los madrileños y de los comerciantes no es proporcional ni proporcionado. Quitar los papeles de los pequeños comercios –dejando, eso sí, los de los grandes comercios, por abusadores, por ricos y por solventes- es otra de las contradicciones de todos estos indignados que en definitiva no están más que entorpeciendo la vida diaria de la zona. Esta situación, más pronto que tarde, debe terminar. El artículo 87.3 está a su disposición, todos los demás paños calientes aplicados, no se sabe si por la cercanía de una más que probable convocatoria de elecciones generales, no servirá de nada si para llegar a ciertos fines, permitimos utilizar estos medios. Por esa regla de tres podemos declarar una anarquía institucional, dejando de pagar impuestos, multas, facturas, hipotecas y todo aquello que mueve la vida diaria de un país. A ver quién le pone el cascabel al gato.
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APRECA emite el siguiente comunicado:
El colectivo de comerciantes, empresarios y autónomos de la Puerta del Sol como usuarios diarios de este espacio madrileño y ante la situación que estamos padeciendo quieren denunciar ante quien corresponda lo siguiente:
1º. Nuestra INDIGNACIÓN por la ocupación inexplicable e ilegal por más de 10 días de un espacio emblemático de la ciudad de Madrid.2º. Nuestra INDIGNACIÓN por la desastrosa imagen que se está dando de la ciudad de Madrid no sólo en España, sino también en Europa y en el mundo.3º. Nuestra INDIGNACIÓN por los problemas que dicha ocupación está causando para la correcta movilidad de clientes, mercancías, proveedores, servicios de protección civil y otros servicios públicos de vital importancia para nuestra ciudad, incidiendo especialmente en el intercambiador de transportes de Sol..4º. Nuestra INDIGNACIÓN por la situación de insalubridad de la zona.5º. Nuestro agradecimiento a la Unidad de Intervención de la Policía Nacional que desde el miércoles ha llegado a la plaza y está especialmente dedicada a la normalización de la misma en tanto en cuanto se resuelve la situación de una forma definitiva.
Como usuarios de dicho espacio reclamamos a los responsables de resolver esta situación los servicios que ya pagamos y las atenciones que merecemos. Somos un colectivo de ciudadanos que exige la acciones oportunas para devolver la zona ocupada a la NORMALIDAD, no persiguiendo otro interés que poder mantener nuestros negocios operativos, negocios que generan puestos de trabajo y pagan impuestos.
Esperamos que se tomen las acciones oportunas de comunicación para resarcir a la Ciudad de Madrid de esta deplorable imagen que se está transmitiendo al mundo entero.
Solicitamos de igual forma que se adopten las medidas necesarias para que hechos como estos no se vuelvan a repetir de forma que se pueda mantener la convivencia cívica entre todos los ciudadanos sin sentirnos rehenes de acciones ilegales como la que estamos sufriendo.
Por último, queremos hacer un llamamiento a los acampados en la Puerta de Sol para que levanten de forma voluntaria y pacífica el campamento, poniendo fin a la ilegal ocupación de la plaza y a los graves perjuicios que están ocasionando a los comerciantes, a todos los ciudadanos de Madrid y a la imagen de nuestra ciudad y de nuestro país en el mundo entero.
En Madrid a 27 de Mayo de 2011.
