Quiero denunciar el trato discriminatorio y la persecución a que somos sometidos los propietarios de vehículos habilitados como vivienda, convirtiéndonos en objetivos permanentemente sancionables por el mero hecho de ser propietarios de caravanas, autocaravanas y campers en general.
Estos vehículos no pueden estacionar como cualquier otro vehículo en muchos municipios del territorio nacional, en especial zonas costeras, y somos sometidos a una continua presión para que hagamos uso de los camping como norma incuestionable y sometidos por unas normativas municipales y autonómicas que son injustas y presuponen de antemano unas malas praxis por parte de los usuarios de dichos aparatos.
Los propietarios de autocaravanas somos parte del turismo que viaja por España y consumimos en función de nuestras necesidades y posibilidades, además de contribuir dinamizar la industria turística.
Las autoridades en lugar de promover y crear sitios para descarga de los residuos de estos vehículos, como medida preventiva y de apoyo de este tipo de turismo, se limitan a acusarnos a priori de prácticas no deseadas y claramente sancionables por quienes las realizen. Dando como única alternativa la obligatoriedad del uso del camping, como si nosotros tuviésemos que ser necesariamente los que solucionemos la eventual falta de clientes de los mismos.
Los ayuntamientos que prohíben el estacionamiento no ofrecen alternativa pública y gratuita en su caso, de zonas en el municipio a unos usuarios de las vías públicas que tienen la documentación necesaria para circular y el mismo derecho que los usuarios de otros tipos de vehículos, haciendo un uso abusivo de su autoridad y menoscabando nuestros derechos, no se sabe en base a qué razones técnicas.
Fuente: http://www.laopiniondegranada.es/opinion/2011/07/07/trato-discriminatorio-usuario-autocaravanas/253985.html
Allí donde no nos quieren, simplemente los ponemos en nuestra particular lista negra y a otra cosa, o sea, a otra localidad donde nos quieran y aprecien nuestro dinero. Sin embargo no debemos parar la denuncia con una carta al director, tenemos la obligación moral y personal -aunque sólo sea por orgullo- de plantear la denuncia allí donde pueda hacer daño: autoridad sancionadora, ayuntamiento implicado, cámara de comercio correspondiente, asociación de empresarios de la localidad o de la región, etc... y por supuesto, colaborar con todo el colectivo firmando en la página reivindicativa de ''Autocaravanistas por sus derechos'' para que quede constancia y para que nuestra firma pueda ser utilizada por asociaciones y colectivos que luchan a diario por conseguir unos derechos estables y definitivos para todo el colectivo. Lamentamos mucho cada uno de los episodios que han dado lugar a esta denuncia personal ante el periódico digital y sobre todo lamentamos (y denunciamos) que este tipo de quejas no empiecen a ser cosa del pasado. ¿hasta cuándo ?
Autocaravanistas por sus derechos