Etiquetas: Carnaval, fiestas, tradición
08/03/2011 - El Progreso (A Pobra do Brollón)
La provincia de Lugo se llenó un día más de colorido y diversión para celebrar el Carnaval, una cita festiva que contó como gran aliado con un sol primaveral que ayudó a que los actos que se sucedieron a lo largo de toda la provincia estuviesen especialmente concurridos. Una de las propuestas más destacadas de la jornada fue la tradicional salida del Oso en la parroquia de Salcedo, en el concello de A Pobra do Brollón.
El buque insignia del Entroido en la Ribeira Sacra superó este año su récord de asistencia. La inauguración unas horas antes de un área de autocaravanas en la capital municipal contribuyó a aumentar el tirón de la convocatoria, ya que muchos autocaravanistas subieron a Salcedo para ver de cerca el espectáculo y conocer el gran poder del animal. Porque el Oso de Salcedo siempre gana la batalla y el que más se resiste es el que más mal parado sale.
En la jornada lúdica de ayer los niños fueron los grandes protagonistas en muchas de las fiestas de disfraces. Así sucedió en una de las convocatorias de mayor tirón en Terra Chá, la organizada por el club Rácing Vilalbés en la Discoteca Troco,
Los más pequeños también fueron las estrellas en otras comarcas como en Sarria, en donde hubo lleno en las fiestas infantiles en la sede de la sociedad La Unión y en el barrio de O Chanto.
Toño Parga / El Progreso (Salcedo - A Pobra do Brollón). En Salcedo, un pequeño pueblo de A Pobra do Brollón, el silencio impera cada lunes de Entroido a las cinco de la tarde. Los cantares de ciego y las gaitas que se escuchan desde la sobremesa cesan y la tensión conquista el ambiente para dar lugar a un rito que va más allá de lo humano y lo divino, que proviene de las entrañas de la misma madre naturaleza y que quienes lo presencian deben considerarse auténticos afortunados. El Oso abandona la frialdad de las cavernas para recuperar el contacto con los hombres y dejar su huella sobre todo aquel que se cruce en su camino. Ocho criados le flanquean y le ponen en bandeja a sus presas, presas que él tiñe de negro azabache.